Siguiendo un enlace de facebook, hoy caí en la página de una asociación de personas con alto coeficiente intelectual llamada Ubermens. Me puse a curiosear un poco, porque es una manera saludable de distraerme de la creciente pila de apuntes sin leer que se va acumulando diariamente en mi escritorio, y encontré algunas reflexiones que me parecieron bastante violentas y las comparto con ustedes.
La condición de membresía de esta asociacion es tener un alto coeficiente intelectual. Este valor mide la inteligencia de un sujeto en relación a una población, teniendo en cuenta que la media normal es 100 puntos. La página nos brinda alguna información al respecto de MENSA (la organización con nombre gracioso que los nuclea):
"Mensa fue fundada en Inglaterra en 1946 por Roland Berrill, un abogado, y el
Dr. Lance Ware, un científico y abogado. Estos intelectuales compartían la idea
de formar una sociedad para personas brillantes, en la cual la única condición
para ser miembro fuese tener un alto índice de cociente intelectual. Los
objetivos originales eran, como lo son hoy, crear una sociedad libre de toda
distinción racial o religiosa. La sociedad da la bienvenida a personas de todo
el mundo cuyo cociente intelectual se encuentra por encima de la media de la
población. Esto se realiza con el objetivo de permanecer en contacto y
participar en una amplia gama de actividades sociales y culturales".
Las diferencias geográficas en el reparto de inteligencia, en opinión de los adscriptos a MENSA (a quien llamaré "mensos" de ahora en más) se explica de la siguiente manera:
"...Aunque no es socialmente aceptable decir en publico, de hecho parece haber
una clara evidencia de diferencias substanciales en CI entre países, aun
tomando
en cuenta las diferencias en la educación, formación y oros
factores. El
mapa muestra la comparación entre los distintos países y su
promedio de
CI...".
"...El CI esta extremadamente relacionado y más probablemente que cualquier otra
medida de los rasgos humano, al éxito educacional, en la ocupación, economía y
sociedad. Esta relación al bienestar y productividad de los individuos es muy
fuerte en algunas áreas en la vida (educación y entrenamiento militar),
moderadamente pero robusta en otras (competencias sociales), y modesta pero
consistente en otras también (practica del derecho). Cualquiera que sea la
medida del CI, este es de una gran importancia practica y social...".
Desde ya, la devoción norteamericana por la cuantificación de entidades tales como la inteligencia, siempre me pareció bastante violenta. ¿Qué define ser o no inteligente? ¿Qué parametros establecen la inteligencia? ¿Cómo se puede medir arbitrariamente?. Hay gente que se empeña en entender a la inteligencia no como un fenómeno complejo en el que intervienen distintos factores y funciones, sino como una entidad discreta. Se tiene o no se tiene, se puede medir "objetivamente". El furor de los estudios psicológicos sobre inteligencia tiene un origen histórico y se relaciona con los períodos de guerra (concretamente el periodo entre la primera y segunda guerra mundial y la guerra fría) y con la necesidad de los estados imperialistas de desarrollar las ciencias con fines claramente bélicos. La voracidad por "la caza de talentos" que tan fuertemente condiciona el sistema educativo de Estados Unidos se inscribe en ese contexto estratégico. A la hora de explicar por qué los chicos negros de los suburbios no tenían el mismo rendimiento que los chicos blancos de clase media, el racismo de la inteligencia fue muy útil. Una manera perfectamente "científica" de "omitir" la influencia del contexto socio-económico en el aprendizaje o de aceptarla como "destino"; sin cuestionar jamás el instrumento de medición.
En fin, mensos racistas.
Les dejo un hermoso videíto realizado por gente de la Facultad de Filosofia y Psicologia de la Universidad de Bahía sobre el racismo con buena música; y un interesante artículo de Pierre Bourdieu: "El Racismo de la Inteligencia", donde da cuenta de distintos tipos de racismos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario